Una más de las Ocurrencias de López y su 4-T es sin lugar a dudas el querer que se reduzca la jornada laboral, obviamente como otras acciones más que llevan a cabo tiene el objetivo electoral, ya que el 2024 será un año de elecciones en nuestro país y buscan el voto de los trabajadores.
Y si bien de entrada para muchos esta reforma de la jornada laboral podría sonar positiva, sobre todo los trabajadores, no lo es tanto, ya que su aplicación no es solamente proponer y ya se dio. Dado que debe haber un consenso sobre todo con el sector patronal, para conocer sus puntos de vista y las posibilidades de llevarlo a cabo. Pero como a López le encanta no proponer, sino ser autoritario y como a él no le afecta en nada que se haga, cual vil aprendiz de tirano, quiere imponerla.
En esa línea, el 16 de octubre del 2023, el diario El Economista publicó una entrevista muy interesante con el presidente nacional de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), José Medina Mora, en la que resalta que la propuesta del sector empresarial es que no es tiempo de que se apruebe la reforma de la jornada laboral.
Como lo señalamos estimados lectores, una reforma de estas características, debe ser consensada con la Coparmex, ya que son uno de los principales actores en este tema. Razón por la cual, y por lo que señala su presidente nacional, Medina Mora, no lo hicieron por parte del gobierno antes de proponer dicha reforma, destacando que en el escenario actual no es factible avanzar en un cambio en el tope de las horas de trabajo en la Constitución, ni con un período de transición para su implementación gradual ni con una reducción menor a la que se analiza en el Congreso.
Dejando muy clara la postura de los empresarios que primero se tiene que elevar la productividad en el país y reducir regulaciones y trámites administrativos, posteriormente se podría discutir la disminución de la jornada laboral. Dado que se tiene que trabajar en aumentar la productividad. Agregando que están conscientes que una parte del aumento de la productividad tiene que ver con las empresas, pero otra tiene que ver con el gobierno. Y a los integrantes de la Coparmex, les toca apostar por la innovación y capacitar al personal; por el lado del gobierno, se tiene que trabajar en disminuir las regulaciones”.
PARLAMENTO ABIERTO
Para la Ocurrencia de López y su 4-T respecto de la reforma de la jornada laboral, se convocó a un Parlamento Abierto, que inició el 16 de octubre del 2023, con el objetivo de analizar la reforma y reducir a 40 horas la jornada semanal.
Razón por la cual, el sector empresarial asistió para participar, con la confianza de que el ejercicio sirva para razonar en que no es el momento de hacerlo. Señaló el presidente nacional de Coparmex. Quien agregó, que en lo que va de este 2023, las empresas han enfrentado tres aumentos de costos importantes debido a cambios de política laboral: el nuevo incremento al salario mínimo, la reforma de vacaciones y una mayor aportación patronal a las pensiones.
Y adicional a esto, la Coparmex, estima que en el mercado laboral hay entre 1.2 y 1.6 millones de vacantes que no pueden cubrirse. Esta falta de disponibilidad de personal sería una mala combinación con una reducción de las horas de trabajo. Se tendría que pagar horas extras dobles y triples. Es una razón más para señalar que no es el momento de hacer esta reforma.
Es por ello, que el sector empresarial no plantearía ni un período de transición ni una reducción más baja a la que se establece en el dictamen aprobado en comisiones de la Cámara de Diputados en abril. Sino que apostarían por convencer que México no tiene las condiciones para reducir el tiempo de trabajo, al menos por ahora.
Siendo muy claro José Medina Mora, respecto a que el sector empresarial no se opone avanzar en esta materia, pero insiste en que no es momento, no es un rechazo; no es momento de aumentar costos. El riesgo como país de subir costos sin aumentar la productividad es que podemos perder competitividad y, en el contexto del nearshoring, lo peor que nos puede pasar es perder la competitividad. Aún con una reforma con implementación gradual, como se hizo en Chile y Colombia, expone, la reforma no sería factible en México porque dichos países, antes de avanzar en reducir su jornada laboral, aumentaron su productividad.
De igual manera, no descarta que un crecimiento en la productividad no sólo abra la puerta a una reducción de la jornada de trabajo, sino a otros cambios legales. Y se podrán hacer muchas reformas laborales una vez recuperada la productividad.
A FAVOR DE LAS 40 HORAS DE TRABAJO
Y si bien, como ya lo señalamos, el sector empresarial mantiene su postura de que México no atraviesa un buen momento para reducir la jornada laboral, el sector laboral, desde sus sindicatos, obviamente piden que el proyecto se apruebe en el Congreso de la Unión sin cambios, es decir, sin un período de transición.
La reforma de jornada laboral se aboca a modificar la Constitución para que sean dos días de descanso por cada cinco días de trabajo, rediciéndose de 48 a 40 horas semanales en el límite legal. Las jornadas laborales de 48 horas a la semana, se mantienen como la regla general en la mayor parte de países de Latinoamérica. Aunque Colombia y Chile recientemente la modificaron de 42 y 40 horas, respectivamente, ambos con una implementación gradual. Ecuador desde 1997 cuenta con una jornada semanal de 40 horas. Esta fórmula es habitual en la mayor parte de Europa y el norte de Asia desde el 2005, según investigaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
A través de la Recomendación 116, el organismo plantea como un escenario ideal llegar a una jornada de 40 horas. Para hacerlo, les sugiere a las economías reducir el tiempo de trabajo de manera gradual y con protección al salario; ambos elementos no están contemplados en el dictamen pendiente de discutirse en el pleno de la Cámara de Diputados.
En la misma línea, la OIT también plantea “considerar las circunstancias de cada país y de cada sector, esto incluye el nivel de desarrollo de la nación, los progresos obtenidos con la implementación de tecnología y la necesidad de elevar el nivel de vida de la población”.
Bajo ese panorama será la discusión de esta reforma de la jornada laboral, con sus pros y contras en la que tanto el sector empresarial en voz de la Coparmex, como lo sindicatos por parte de los trabajadores, en la que esperamos que el objetivo principal sea que tengamos un México más productivo y lograr recuperar el nivel que había antes de la pandemia y tender a mejorarlo, y no solamente pensar en que se laboren menos horas y días a la semana ganando lo mismo, ya que sería una visión muy simple para lo que nuestro país necesita.