Este miércoles a tarde fue sepultado Carlos Domínguez Rodríguez, periodista independiente asesinado el sábado pasado en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
Su última morada es un panteón ubicado en la localidad de Nuxco, del municipio de Tecpan en Guerrero.
Carlos quería terminar sus días en Acapulco, lugar en donde estudió e inició su carrera periodística, pero en este lugar el panteón está a metros del mar, idóneo para cumplir su último deseo.
Domínguez estuvo acompañado de familiares y amigos más cercanos. Tras partir de la funeraria en donde fue velado en Acapulco, el féretro llegó hasta este lugar para ser enterrado en medio de la playa.
Supimos de este lugar, mi hermana me dijo, me parece muy bonito, a él le encantaba nadar, le encantaba la playa me parece un lugar de paz. Él era muy discreto, quería estar con nosotros nada más, con su familia, no tenía espacio para otras personas”, comentó Carlos Domínguez, hijo del periodista.
Los familiares solo piden a las autoridades de Tamaulipas y del gobierno federal que esclarezcan el crimen, el cual se suma a una larga lista de periodistas asesinados en México.
Agradecieron que la Procuraduría de Tamaulipas ofrezca hasta dos millones de pesos para quien de información que lleve a la captura de los responsables del homicidio, pero la exigencia principal es que investiguen y el hecho no quede impune.
Ojalá y sirva de algo, es un gesto que se agradece, pero en lugar de ponerse a poner recompensas deberían de en verdad investigar porque yo estoy seguro que es pura simulación, porque eso ha sido siempre, simulación, y ustedes saben que no han resuelto ninguno, siguen asesinando compañeros de ustedes y no pasa nada en México”, afirmó Carlos.
Tras el sepelio, lo familiares regresaron a Acapulco, y posteriormente se trasladarán a sus lugares de residencia.