Volvieron a salir y probaron que México no es propiedad de una sola franquicia política partidista.
Salieron y mostraron que las encuestas que auguran un triunfo seguro de Morena en 2024, no los han contado.
Salieron y se hicieron oír.
Se comprobó que hay un grupo muy grande de mexicanos que no están contentos con este gobierno, ni con muchos más.
Lejos de los liderazgos, miles de mexicanos salieron porque ya están hartos de tanto abuso de los políticos.
Pie a pie, miles de mexicanos se pararon para luchar en contra de un PRI de más de 70 años, de un PAN que solapó a criminales, de un peñismo que hundió al país en la más grande corrupción y en contra de una Cuarta Transformación que busca apoderarse del país, de su historia y de sus habitantes.
Quienes estuvieron en las plazas de muchas ciudades de México exigieron respetar las instituciones porque saben que este país solo puede subsistir si hay instituciones.
Para quienes luchan contra Morena y Andrés Manuel López Obrador hay futuro, solo que el reto es que exista una candidatura que una. Sin embargo, eso si se ve más difícil.
Este domingo 26 de febrero, el rosa de defensa al INE fue más intenso que el guinda, sin embargo el color de Morena trabaja todos los días y maneja el presupuesto federal.
Con Plan B o sin él, el reto es mantener el impulso de miles que salieron a gritas y evitar que en 2024 callen y se abstenga de votar.
@agsarubbi
