Andrés Manuel López Obrador se está enfrentando a su verdadero victimario: Morena, el partido que fundó para llegar al poder y que vive por él.
Morena se convierte en la preocupación más importante para el Presidente porque a siete meses de la elección intermedia, “la esperanza de México” como se presenta el instituto político, está perdido. No tiene brújula y ha revivido a las tribus que siempre han acabado con la izquierda en México.
Mientras AMLO busca recuperar el encanto ciudadano que lo llevó a la Presidencia, su partido no responde y ya se pelean los puestos de dirección.
- Más sobre el columnista: 100 mil en el Zócalo
Y cómo no, si el nuevo dirigente podrá palomear las candidaturas de 21,368 cargos de elección y 15 gubernaturas.
Pero también, el nuevo Presidente Nacional de Morena podrá manejar a su antojo las multimillonarias prerrogativas.
Sin embargo, con todo el dinero y con el poder Presidencial de apoyo, Morena parece no significar nada. Ante los ojos de los ciudadanos, el partido es Andrés Manuel López Obrador, nadie más ni nadie menos.
De ahí que AMLO haya tenido que echar mano de un as bajo la manga, la consulta popular para enjuiciar a ex Presidentes. Con ese pretexto podrá hacer campaña desde las mañaneras con el tema que más simpatía genera: el combate a la corrupción.
- Más sobre el columnista: Andrés Manuel López Obrador es quien más ataca a los medios.
Pero… esa consulta no llevará a nada. Aunque los supuestos 30 millones de simpatizantes del Presidente voten a favor de investigar a Peña Nieto o Felipe Calderón, faltará probar las denuncias.
De antemano adelantamos que esa consulta traerá como resultado el desencanto a un gobierno que no dará los resultados esperados. No se meterá a la cárcel a ningún ex Presidente y pronto sabremos que ese esfuerzo, que costará 3 mil millones de pesos, no llevará a nada al país.
Al único que le servirá será a López Obrador, para meterse a la campaña y le dará un respiro ante un partido que no le está sirviendo a sus intereses políticos.
@agsarubbi