Burocracia en perjuicio de familias que se sostienen económicamente de un negocio.
Será por la pandemia, pero este órgano desconcentrado ha caído en desorden.
El presidente nombro a un irresponsable en esta Comisión
Por Guillermo Pimentel Balderas
La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), todo parece indicar, se ha dedicado a cerrar más establecimientos de los que puede atender para verificar y reabrir. Y, lo único que logra es que muchos pequeños negocios vayan a la quiebra.
Al parecer, por la pandemia, este órgano desconcentrado con autonomía administrativa, técnica y operativa, pero que es supervisada por la Secretaria de Salud, se ha convertido en una maraña burocrática y caído en desorden.
Un restaurante, del cual dependen 5 familias; entre ellas 2 madres solteras y un padre con 3 hijos -que es su único sostén-, el 08 de Junio pasado, fueron visitados por inspectores de la Cofepris y suspendieron sus actividades. Esto, a pesar de que a finales de Marzo, se visito el lugar y se levantó un acta de verificación con varios puntos por subsanar. Se hizo la contestación. Entonces, el 25 de Mayo, llega un correo donde se especifica que en día hábil habría que subsanar lo faltante con la respuesta.
Las dueñas del local habían asistido -casi diario- a la Cofepris para ver cómo iba su caso y, solo les decían que había que esperar de 30 a 60 días hábiles para que les llegara un correo electrónico donde les dirían si ya estaban correctos los puntos por subsanar, para después, esperar la visita de un verificador y, después, hacer cita otra vez para solicitar por escrito el retiro de los sellos de suspensión de actividades.
Pero, con esta maraña burocrática, el negocio ya no existirá pues no hay posibilidades de seguir manteniéndolo. Cinco personas se quedarían sin empleo y un negocio con más de 24 años (de 60m2 aproximadamente) y sostenido con tanto esfuerzo dejará de existir. Un negocio que nunca ha tenido problema ni con las mismas autoridades, ni con la clientela, ni con vecinos. Siempre ha estado a la altura en calidad y en higiene.
Las afectadas –por medio de una petición de María Fernanda Fragoso Roque, difundido por change.org-, especifican que han enviado correos al Lic. Juan Carlos Galicia Marrufo, Director Ejecutivo de Dictamen Sanitario; al Lic. Carlos Antonio Zazueta Pozos, Director Ejecutivo de Supervisión y Vigilancia Sanitaria y, por supuesto, también al Doctor Alejandro Ernesto Svarch Pérez, Comisionado Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios; ¡sin respuesta por parte de ninguno de ellos!
¿Por qué les suspendieron? No tenía termómetro el refrigerador, había 4 cuchillos con mango de madera; las tarjas no tenían letrero de lavado de manos y lavado de utensilios de comida; las materias primas no estaban registradas como Primeras Entradas, Primeras Salidas; no tener Calorímetro; 3 empleados no tenían un curso de las buenas prácticas de higiene; no tener dispositivo contra insectos, ni trampas para roedores; el comprobante de fumigación no tenia especificado el líquido con el cual se fumiga y, por no tener bitácoras de limpieza.
Y, ¿sabe usted a quien nombró el presidente como responsable de la Cofepris por la pandemia?
¡¡A López Gatell!!
Correo: guillermo.pumageneracion1979@gmail.com