Un equipo de investigadores logró desarrollar dos cremas, para manos y para pies, que alivian la hipersensibilidad cutánea que sufren muchos pacientes cuando reciben quimioterapia.
Lo han conseguido investigadores españoles del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), en colaboración con la Universidad Miguel Hernández de Alicante y la empresa emergente (del CSIC) Alodia Farmacéutica.
Las dos cremas, que ya están disponibles en las farmacias, calman la hipersensibilidad cutánea que padecen los pacientes oncológicos, ha informado el CSIC en una nota en la que recuerda que el uso de agentes quimioterápicos para el tratamiento de distintos tipos de cáncer lleva asociado un alto riesgo de complicaciones neurológicas y motoras, caracterizadas por la hipersensibilidad mecánica y al frío y el entumecimiento de manos y pies.
La científica ha precisado que en esos pacientes, la funcionalidad del sistema nervioso periférico está deteriorada y, cuando esta neuropatía periférica afecta a la calidad de vida del paciente, se suele proceder a la reducción e incluso a la suspensión del tratamiento de quimioterapia.
Durante los últimos años el equipo liderado por esta investigadora del CSIC, en colaboración con el grupo de Antonio Ferrer en la Universidad Miguel Hernández (UHM) de Elche, ha trabajado en este campo, y gracias a la financiación de la Comunidad de Madrid y a la colaboración con la empresa farmacéutica Alodia Farmacéutica se ha iniciado ya el desarrollo farmacéutico de estas moléculas para el tratamiento tópico de la neuropatía periférica.
Esta empresa impulsó primero el desarrollo de una de estas moléculas como ingrediente neurocosmético, ya que los ensayos de seguridad indicaron que la molécula seleccionada en su forma pura no era ni irritante ni mutagénica, lo que permitió su registro como ingrediente cosmético.
Después se formularon dos preparados cosméticos para manos y pies, especialmente sensibles cuando se sufre de neuropatía periférica, y esas formulaciones cosméticas, tras superar los estudios de absorción dérmica, estabilidad térmica y eficacia del conservante para prevenir contaminaciones bacterianas, pasaron a comercializarse en las farmacias.