Este domingo se llevará a cabo el último Mercado de Trueque del año en el Bosque de Tlalpan, donde los habitantes de la Ciudad de México podrán intercambiar sus residuos por productos agrícolasproducidos en la capital.
En dicha actividad, que se realizará de 08:00 a 14:00 horas, se podrán canjear residuos reciclables como papel, botellas de vidrio, cartón, latas de aluminio, PET, tetrapack y electrónicos por productos agrícolas producidos en la capital del país, provenientes de Xochimilco, Tláhuac y Milpa Alta.
La intención es fomentar y apoyar a los productores del suelo de conservación, con el objetivo de concientizar a la población sobre la oferta local que existe.
El Mercado de Trueque es un programa de educación ambiental que tiene como finalidad mostrar a los ciudadanos de manera tangible y directa que la basura se convierte en materia prima y se separa adecuadamente.
Esta iniciativa fomenta la cultura y economía del reciclaje de manera constante y contribuye a minimizar la cantidad de residuos que se entregan al camión de la basura, toda vez que en esta urbe se generan cerca de 12 mil toneladas de residuos sólidos, de los cuales sólo 12 por ciento son reciclados.
En este espacio también se acepta el aceite de cocina usado para reciclarlo y evitar que por cada litro de esta grasa comestible se contamine casi un millón de litros de agua.
Por cada litro donado, que se recomienda llevar en botellas de plástico, se producirá una cantidad igual de biodiésel, un combustible limpio parecido al diésel y elaborado de fuentes renovables como los aceites vegetales.
En la mayoría de las ocasiones, el aceite comestible es desechado por el desagüe a la red de alcantarillado, lo que produce obstrucciones y malos olores en las cañerías, se crea alimento para fauna nociva como ratas y cucarachas, además de que su proceso de depuración es más difícil y costoso.
De acuerdo con el gobierno capitalino, cuando el agua y el aceite se revuelven, se contaminan las cuencas internas, el mar y los acuíferos, lo que interfiere en la vida natural, degrada el entorno y facilita la proliferación de microorganismos perjudiciales para la salud.