Carlos Aguila Franco
SHEINBAUM BAJO LAS ÓRDENES DE LÓPEZ
Estando ya en plena actividad electoral para las elecciones del 2 de junio del 2024, las acciones y los hechos nos están mostrando verdaderamente quién decide y manda en Morena, así como lo que se pretende hacer si es que ganan las votaciones.
Las reformas en el Congreso de la Unión que López pretende llevara a cabo antes que deje su cargo el 1 de octubre del 2024, muestran y demuestran, que él no las está planteando como el final de su mandato, sino que peligrosamente lo que ve es hacia el futuro.Ya que esas reformas más bien son un Plan para mandar de forma transexenal y de forma fáctica este conjunto de reformas que envió de cambios, reitero, en el cierre de su sexenio, nos muestran, primeramente, no a un mandatario normal, que cerrará su ciclo, sino que busca, pretende y quiere alargarlo, y con ello seguir impulsando su supuesto proyecto de la 4-T, que obviamente en lo que a él le correspondió, no lo ha logrado.
Y, por otra parte, convertir a Claudia Sheinbaum, si gana, en una simple encargada de despacho, para poder llevar a cabo esos planes que López ya los ha elaborado, que ya están listos, para que ella simplemente los lleve a cabo.
Vale la pena recordar declaraciones de López que comprometen a Sheinbaum si es que es la próxima presidenta, en que continúe con lo que en este sexenio se ha pretendido hacer, más lo que ya le está ordenando que hará.
Inclusive ya ha sido ventilado públicamente, que a López no le gustó que Sheinbaum en el debate no lo defendiera, al igual que a sus hijos, y mucho menos defendiera lo que, según él, han sido sus grandes logros, en tanto que solamente se la pasó presumiendo los grandes logros, pero de ella, mientras que los otros dos candidatos, exhibían y cuestionaban la administración de la 4-T.
Es por ello que, el enojo de López va encaminado hacia qué tan lopezobradorista fue realmente Sheinbaum en el debate presidencial, el cual no resultó como López lo esperaba, aunque para quienes no son de Morena o sus partidos afines, Claudia se mostró como una candidata muy alineada con los discursos, los proyectos, de su jefe López.
Pero para López, no fue así, y su clara respuesta la tuvo a través del periódico del que es Directora su comadre, Carmen Lira, La Jornada, ni más ni menos que en la sección Rayuela, que es donde este diario plasma su línea editorial, lunes y miércoles posteriores al debate, el mensaje fue claro, señalando: “Claro que tengo padre, sostenía la adorada mano, ¿sino como estaría yo aquí?” Y “Fue tanta la preocupación por ganar la batalla que se olvidaron de los logros conseguidos por un fuerte liderazgo y muchos leales profesionales, que vaya que los hubo”.
Sumándose a lo anterior, como se ha hecho notoria,esa llamémosle demanda del lopezobradorismo hacia la figura de Sheinbaum, que le exige no solamente reproducir lo que López dice, sino que lo defienda, ya que si para quienes como lo señalé, no son de Morena, Claudia les pareció ser, la primera defensora y alabadora de López, su calca, en todo, para López y los morenistas no lo fue así, razón por la cual vinieron esos llamados de atención, ese jalarle la rienda,quizás para que no se desboque y olvide que sí hay jinete que lleva el control, marca el paso y camino a seguir.
La reacción a ese jalón de orejas fue rápida por parte de Sheinbaum el mismo día de los mensajes afirmando “Defendí con el corazón, el pensamiento y el alma a la Cuarta Transformación, que es el proyecto del pueblo de México” elogiando a López y su 4-T. Sin embargo, los golpes ya se los había dado López. Demostrando que como se comentó cuando le dio el bastón de mando, que ella tiene el bastón, y él sigue con el mando.
Pero esto que aconteció, tendrá también sus resultados, que seguramente veremos plasmados en cómo actuará Sheinbaum en el segundo debate, si auto elogiándose con sus logros, sus “políticas exitosas” que tanto presume, sus “premios recibidos” como en el primero, preocupada por tratar de convencer a los indecisos, e inclusive a los opositores para que voten por ella, o simplemente sumida, doblegada, acatando las órdenes de López en qué decir, cómo decirlo, qué defender, qué alabar.
Basta recordar lo que nos enteramos el 7 de febrero del 2024 cuando afirmó Sheinbaum que hizo suyas las 18 reformas constitucionales y las dos legales presentadas la víspera por López y serían la base de su Programa: “Estas propuestas son parte del programa que vamos a presentar el 1 de marzo a la ciudadanía como inicio de la campaña electoral de nuestra Coalición Sigamos Haciendo Historia. Estamos convocando de manera muy importante a una discusión de todo el país de estas propuestas a nuestros militantes, simpatizantes y, por supuesto, un debate nacional sobre lo que presentó el presidente el día de ayer”.
La orden la dio López y Claudia la acató. Por eso Sheinbaum insiste y recalca que TODO SEGUIRA IGUAL si ella gana.
La cruda realidad es que día con día se viene comprobando lo que era un rumor, que se está convirtiendo en realidad, Sheinbaum no mandará ni decidirá sola si gana, López será la mano que mesa la cuna, el poder tras el trono, el Maximato Pejista.
Por ello el 2 de junio del 2024 el voto debe razonarse y elegir entre QUE TODO SIGA IGUAL, o votar por el Cambio que México necesita. ¡TU LO DECIDES!
