El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que reducir la tasa de homicidios en el país le “llevará un tiempo”, pero que su compromiso de reducir la violencia y la inseguridad sigue firme.
Cuestionado por el periodista Jorge Ramos sobre los índices de violencia y homicidios en el país, el mandatario respondió: “estamos trabajando todos los días, como nunca. No había estadísticas confiables de los delitos cometidos en el país. Los presidentes no se hacían cargo, delegaban… Hemos controlado la situación según nuestros datos”, dijo.
Ramos replicó que en lo que va del actual gobierno, ocho mil 524 mexicanos han sido asesinados, tendencia que de continuar resultaría en que “el 2019 va a ser el año más sangriento”.
El presidente insistió en que recibió a un país con altos índices de violencia y criminalidad, pero que mediante una nueva estrategia su gobierno atenderá la problemática.
Expuso que la violencia tiene su origen en el bajo crecimiento económico de México durante los sexenios pasados, pues si no hay crecimiento no hay empleo ni bienestar y por consiguiente se detona la violencia.
“Todo esto nos va a llevar algún tiempo, pero ya comenzó, y tiene como complemento la perseverancia, la coordinación… No estoy diciendo que está resuelto el problema, lo que estoy diciendo es que hemos mantenido los niveles que existían anteriormente, o se revertió la tendencia que traíamos sobre el delito de homicidio… Vamos poco a poco, mi compromiso es que van a bajar los homicidios”, dijo.
