Luisa María Alcalde Luján da toda su atención a la “huelga” de telefonistas.
Mientras, a trabajadores del INPI los trata como de segunda.
Existe la posibilidad del estallar la huelga el 5 de agosto en las 102 coordinaciones del Instituto a nivel nacional.
Por Guillermo Pimentel Balderas
Sin atención ni mucho menos preocupación existe por parte de la Secretaria del Trabajo (STyPS) por el movimiento de los trabajadores del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), hasta el momento no hay ninguna respuesta y la voluntad política para tratar de resolver sus demandas.
Por lo tanto, determinaron iniciar un paro de “brazos caídos” a nivel nacional para después proceder a una huelga a partir del próximo 5 de agosto, en las 102 coordinaciones del INPI en el país.
En este movimiento sindical, no hay reflectores y atención de las autoridades de la Secretaria del Trabajo y mucho menos de su encargada Luisa María Alcalde Luján. No hay farsa sí seriedad. Ya iniciaron la suspensión parcial de labores debido a que el INPI no ha cumplido el Contrato Colectivo de Trabajo (CCT).
Por ejemplo, en el municipio de Felipe Carrillo Puerto, Quintana Roo, varios medios locales difundieron que, Yuriana Toh Martín, secretaria general del Sindicato del INPI en esta localidad, dijo que el emplazamiento a huelga estaba programado desde junio pasado pero, debido a que se estableció una mesa de negociaciones, se postergó. Sin embargo, lamentó que hasta el momento no hay ninguna respuesta por lo cual decidieron iniciar el paro de “brazos caídos” a nivel nacional.
Toh Martín dijo que aunque en Quintana Roo son solo 18 los trabajadores sindicalizados, son de vital importancia para las tareas que se realizan a favor de las comunidades indígenas a pesar de que no se cuenta ni siquiera con las herramientas básicas para la realización de su trabajo como computadoras, impresoras y en general equipo de oficina. A nivel nacional los sindicalizados afectados son un total de mil 300. De no haber ninguna respuesta favorable el 5 de agosto próximo estallará la huelga, advirtió.
Entre sus exigencias destacan: Incremento directo al tabulador salarial. Pago inmediato de las diferencias a la prestación de “Ayuda por Servicios” 2019-2021. Pago de las prestaciones Despensa, Ayuda por Transporte, Ayuda por Servicios y Previsión Social Múltiple de acuerdo con el CCT. No al desplazamiento y acoso laboral del personal sindicalizado por parte de los directivos. Recuperación de la materia producto del trabajo. Solución inmediata a la retabulación y rezonificación. Aumento en las prestaciones señaladas en el CCT. De manera inmediata exigen también la dotación de las herramientas y equipo necesario para cumplir con su labor.
Cabe señalar que las estadísticas de indígenas en Quintana Roo de acuerdo con el censo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) 2020, indican que de una población de 204 mil indígenas: 174,817 hablan lengua maya, 7,390, Tseltal, 5,801, Ch’ol y 4,924, Tsotsil. Hay en el estado 52 mil 265 afroamericanos.
En otro escenario, el Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana, con su eterno dirigente Francisco Hernández Juárez y la empresa de Teléfonos de México (Telmex), del neoliberal Carlos Slim Helú que, administra su hijo Héctor Slim Seade, llegaron a un “acuerdo” para levantar la “huelga” que, se dice, fue simulada.
Fue un escenario ideal para que la encargada en la Secretaria del Trabajo y Previsión Social (STyPS), Luisa María Alcalde Luján, apareciera y se luciera con la versión oficial del fin de este “movimiento sindical”. Todos los reflectores a esta “huelga”.
Correo: guillermo.pumageneracion1979@gmail.com
