• Estos importantes resultados ambientales obtenidos, hicieron que la Ciudad de México fuera merecedora de 27 premios nacionales e internacionales, producto del trabajo comprometido y coordinado con otras áreas del Gobierno de la Ciudad
En una apretada síntesis la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México muestra el trabajo realizado y la transformación que ha tenido la capital del país. Una ciudad que en los años 80 y 90 se definió como la ciudad más contaminada del planeta y que hoy, con voluntad, trabajo, conocimiento y honradez, demuestra que es posible reabrirle las puertas a la naturaleza, construir bienestar para las personas y avanzar hacia esa ciudad sustentable que aspiramos.
En el libro “Ciudad de México, seis años de transformación ambiental”, la doctora Marina Robles García, secretaria del Medio Ambiente capitalina, comparte que se inició la administración con la aspiración y la firme determinación de transformar las condiciones ambientales de la Ciudad.
“Las acciones por hacer las planeamos y ejecutamos dirigidos por la doctora Claudia Sheinbaum, en ese momento Jefa de Gobierno de la Ciudad, y en el último año de gobierno dirigidos por el doctor Martí Batres Guadarrama. Para diseñarlas preguntamos a la gente, indagando sus sueños, recorriendo sus calles y colonias, identificando sus necesidades y sus problemas”, explica la doctora Marina Robles.
Agrega que “en esos recorridos, junto con la gente, imaginamos los tipos de áreas verdes que debíamos construir, la rehabilitación de los ríos, vislumbramos también una ciudad cada vez más comprometida con el planeta que disminuye las emisiones de los gases contaminantes que están provocando el cambio climático y también soñamos con una ciudad que respira un aire cada vez más limpio. Seis años después podemos ver que estos sueños se están volviendo realidad”.
Durante muchos años se impulsó en la Ciudad la preferencia del cemento a la tierra y la vegetación, e incluso el espacio público verde y apacible estuvo destinado sólo a las zonas de mejores ingresos económicos. En esta administración iniciamos el reequilibrio de la distribución y el acceso a las áreas verdes. Trabajamos cambiando la idea de que la naturaleza es sólo una escenografía que rodea el exterior de la ciudad, para abrirle paso hacia la parte urbana y así construir verdaderos corredores que permitan el intercambio entre las especies y nos reconectemos con la naturaleza de la que somos parte.
El trabajo realizado permitió tener 42 nuevas especies de aves en nuestro territorio, pasamos de tener un registro de 355 especies a 397. También ha permitido tener avistamientos de especies que antes no se observaban fácilmente en la ciudad, como el coyote, el lince americano y la zorra gris. Todo esto representa una gran reconciliación con entre las personas y la biodiversidad.
Regular y ejercer una política pública de biodiversidad en la Ciudad ha permitido preservar especies de flora y fauna, que han contribuido a que México sea uno de los 17 países megadiversos que, en conjunto, albergan el 70% de la biodiversidad mundial, y que hacen que la Ciudad de México tenga el 12% de la biodiversidad nacional y el 2% de la biodiversidad de todo el planeta.
Parte fundamental para preservar la biodiversidad es que en la Ciudad de México se incrementó la producción anual de plantas en los viveros San Luis Tlaxialtemalco, Nezahualcóyotl y Yecapixtla. Pasamos de alrededor de 300 mil ejemplares producidos en 2018 a más de 10 millones en la actualidad. También incrementamos el número de especies nativas producidas en los viveros: En el vivero Nezahualcóyotl y Yecapixtla pasamos de 20 a 80 especies nativas, mientras que en el de San Luis Tlaxialtemalco teníamos cuatro especies nativas y ahora suman 53 especies.
En 2019 nos comprometimos a plantar 10 millones de plantas y la meta la superamos por mucho. De 2019 a 2024 establecimos más de 51 millones de árboles, arbustos y cubresuelos. Esto ha permitido incrementar la superficie de área verde por habitante, pasando de 14.5 m² en 2017 a 19.4 m² en 2020, cifra que seguramente se incrementará al sumar los trabajos realizados de 2021 a 2024.
En coordinación con la Secretaría de Obras y Servicios y el Sistema de Aguas, rehabilitamos y creamos 19 áreas verdes de gran tamaño que adicionaron mil 500 hectáreas al espacio público de la Ciudad para el disfrute de las personas. Estos parques se ubican en las zonas de la Ciudad, que históricamente habían tenido carencia de acceso a espacios públicos dignos, y cuentan con distintos tipos de jardines, zonas de estar, ciclopistas, trotapistas, teatros al aire libre, gimnasios abiertos, casetas de vigilancia, entre otras infraestructuras que los vuelven sitios seguros para el esparcimiento, el deporte y la cultura.
Más de la mitad del territorio de la Ciudad de México (59%) es Suelo de Conservación y allí se resguarda el mayor patrimonio natural y biocultural de la capital. Acciones de revegetación, restauración y rehabilitación han permitido mejorar las condiciones ambientales para cerca de 220 especies de fauna nativa y migratoria que habitan en el suelo de conservación.
La Ciudad de México cuenta con 25 Áreas Naturales Protegidas y 33 Áreas de Valor Ambiental que suman más de 22 mil 178 hectáreas, las cuales resguardan una gran riqueza biológica. Desde 2019 se rehabilitaron y abrieron al público cinco áreas naturales protegidas para el disfrute de las personas, ya que es necesario conocer para conservar.
Mediante el Programa de Monitoreo de la Biodiversidad, puesto en marcha en 16 Áreas Naturales Protegidas, se ha podido conocer con mayor precisión la condición de los hábitats y definir actividades para su conservación o restauración. Hasta el momento registramos mil 749 especies, y un indicador de la buena salud de los ecosistemas de la Ciudad es el incremento en los registros de fauna silvestre.
Desde 2019 trabajamos en la construcción de una Ciudad sustentable con la recuperación de cuerpos de agua, como canales, ríos y humedales. A la fecha, suman 32 hectáreas de nuevos humedales y 722 hectáreas de humedales naturales rehabilitados. El rescate de estos espacios naturales ha permitido sacar de la ruta de extinción a muchas especies, además de lograr que cada día esta Ciudad se reconcilie con la naturaleza y se le abra paso a la vida y a la sustentabilidad.
También se impulsó el aprovechamiento sustentable del agua mediante la instalación de sistemas para cosechar la lluvia. En total se instalaron 73 mil sistemas en hogares, que se traduce en un beneficio para más de 240 mil personas y un ahorro de 2 mil 700 millones de litros de agua captados a través de los cosechadores.
Mediante nuestro proyecto Escuelas de Captación instalamos sistemas para cosechar la lluvia en todas las escuelas primarias y secundarias públicas de la Ciudad de México, lo que permitirá un potencial de captación de 918 millones de litros anuales de agua, equivalente a 91 mil 800 pipas de 10 mil litros. También instalamos cosechadores de lluvia en los Centros de Cultura Ambiental, en los Puntos de Innovación, Libertad, Arte, Educación y Saberes (PILARES), en la Universidad Rosario Castellanos, en la Universidad de la Salud, en el Tecnológico de México, así como en el Instituto de Educación Superior. En total colocamos 2 mil 338 sistemas.
A través de siete ejes estratégicos que conforman el Programa Ambiental y de Cambio Climático de la Ciudad de México 2019-2024, se logró reducir 2 millones 322 mil 153 toneladas anuales de los gases que provocan el cambio climático, lo que representa un avance del 105.5% respecto a la meta establecida.
Esta mitigación lograda es equivalente a que dejaran de circular todos los autos de la Ciudad por 51.8 días o que 329 mil 973 vehículos dejaran de circular durante un año o a realizar una reforestación con 5 millones 908 mil 742 árboles de pino y cuidarlos durante 50 años.
Mediante el proyecto presidencial Chapultepec Naturaleza y Cultura, en coordinación con la Secretaría de Cultura federal y la Secretaria de Obras y Servicios capitalina, se realizaron 53 intervenciones en el Bosque de Chapultepec. Se hizo restauración y remediación ambiental, se rehabilitó la infraestructura en abandono, se mejoraron museos y el Centro de Conservación de la Vida Silvestre de Chapultepec. También se construyeron nuevos recintos culturales, como el Centro de Cultura Ambiental y el Jardín Escénico.
El Proyecto permitió restaurar el patrimonio histórico y natural de los manantiales de Santa Fe y la Ermita Vasco de Quiroga, a través del ordenamiento, la rehabilitación y el saneamiento de las áreas existentes. En total, se rehabilitaron 11 mil 950 m² de áreas de manantiales y 6 mil 830 m² de áreas verdes. El proyecto también contempló una zona de humedales que tienen como principal función sanear el agua de descargas residuales que dan hacia el Río Tacubaya.
Como parte de las acciones de bienestar animal transformamos los zoológicos en Centros de Conservación de la Vida Silvestre y bajo esta perspectiva, se trabajó para preservar y cuidar la fauna silvestre a través de la educación ambiental, la investigación, la colaboración con diversas instituciones y otras herramientas de conservación.
En los Centros de Conservación de Chapultepec, San Juan de Aragón y Los Coyotes, bajo el cuidado de expertos en fauna silvestre, se registró el nacimiento de mil 352 ejemplares en los últimos seis años y hay 211 animales que se encuentren en etapa geriátrica y algunos de ellos hayan superado la expectativa de vida de su especie, gracias a la alimentación, atención médico-veterinaria y todos los cuidados que reciben diariamente.
Para incrementar las condiciones de bienestar de todas las especies que habitan bajo el cuidado de expertos en estos Centros se rehabilitaron y mejoraron los recintos y las instalaciones. Un ejemplo es la ampliación del albergue para elefantes africanos en el Centro de Conservación de San Juan de Aragón, donde actualmente habitan Ely, Gipsy y Annie; cabe señalar que previo a la ampliación, el espacio ya superaba estándares internacionales en extensión y necesidades de manejo, por lo que de esta manera incrementamos las condiciones de bienestar de las tres elefantas.
Estos y otros importantes resultados ambientales obtenidos durante la administración, hicieron que la Ciudad de México fuera merecedora de 27 premios nacionales e internacionales, producto del trabajo comprometido y coordinado con otras áreas del Gobierno de la Ciudad, de manera particular con la Secretaría de Obras y Servicios, dirigida por Jesús Esteva, la Secretaría de Movilidad, dirigida por Andrés Lajous, la Secretaría del Trabajo y Fomento al Empleo, dirigida por José Luis Rodríguez y el Sistema de Aguas, dirigido por Rafael Carmona. Gracias a esta labor conjunta, la Ciudad de México ha sido reconocida por su fuerte liderazgo ambiental a nivel mundial.
El libro está disponible de forma gratuita en la página web de la Secretaría del Medio Ambiente: https://www.sedema.cdmx.gob.mx/storage/app/media/CIUDAD_DE_MEXICO_seis_anos_de_transformacion_ambiental.pdf.