REALIDADES
Carlos Aguila Franco
LOS SUEÑOS GUAJIROS EN EDUCACIÓN VS LA CRUDA REALIDAD
Sin lugar a dudas un tema por demás importante para cualquier país que quiera que sus habitantes tengan un futuro estable, es la educación. Pero una educación de calidad, con programas eficientes y maestros capacitados en la enseñanza, ya que en sus manos está el futuro del país, es decir, preparar y educar a los niños y jóvenes.
Es por ello que llama la atención las declaraciones del 14 de julio del 2024 donde Claudia Sheinbaum aseguró y prometió, que dará continuidad a la Nueva Escuela Mexicana, porque representa un nuevo modelo educativo cimentado en la “revolución pacífica” que es la Cuarta Transformación. En la revolución de las conciencias, en construir una nueva forma educativa que no solamente lleve conocimiento, sino que también transforme la vida de las personas. La educación no es un privilegio, la educación es un derecho del pueblo de México, es el derecho de todos los mexicanos pues está establecido en el artículo tercero de la Constitución Política mexicana.
Y ante su constante afirmar y prometer que con ella NADA CAMBIARÁ, que todo seguirá igual que con López, en cuanto a la educación, es importante lo que el 30 de junio del 2024 la Revista de Análisis Político, Buzos de la noticia, difundió “La educación que dejó AMLO”, donde se señala que el Instituto Nacional de Educación para los Adultos (INEA) dio a conocer que al concluir la administración de López, en México habrá 27 millones 158 mil personas de 15 años o más en condición de rezago educativo porque no saben leer, escribir ni hacer cuentas o no han concluido la educación básica. En este sexenio, de 2018 a 2022, el número de habitantes con esta problemática subió de 23.5 millones a 25.1 millones.
Agregando que, en cuanto al rezago educativo total, los avances son muy lentos, los mencionados, más quienes no han concluido la educación secundaria en México, constituyen una tragedia: a diciembre de 2023 el 27.9% de las personas en la edad señalada, estaban en rezago educativo. Yrespecto del 2019, hubo un cambio de 27.99 millones a 27.56 millones.
Al respecto Mario Luis Fuentes, doctor en Ciencias Políticas y Sociales por la UNAM, declaró para el periódico Excélsior, que “Si esta tendencia se mantuviese, México tardaría 54 años más en erradicar el analfabetismo”, Destacando que actualmente es indiscutible que el rezago educativo es resultado de la pobreza. Por otro lado, en un sistema en el que la pobreza coexiste con la desigualdad entre propietarios y no propietarios de medios de producción, la desigualdad educativa es un resultado lógicamente esperable.
En el 2023, la desigualdad educativa en México superó el promedio de los países de América Latina y del mundo, de acuerdo con datos del Foro Económico Mundial. Es decir, en el país existen grandes diferencias en el acceso a la educación, recursos didácticos e infraestructura educativa de calidad. Por lo anterior, el papel del gobierno mexicano en materia educativa es fundamental y urgente.
En el mismo tenor, Alejandra Llanos Guerrero, coordinadora de educación y finanzas públicas del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), entrevistada por Forbes México, aseveró que para este 2024 se destinó un 3.2 por ciento del PIB a la educación, cuando el mínimo recomendado es de un 4 por ciento. Tras cinco años de gobierno y a unos cuantos meses de la conclusión de mandato, el CIEP consideró que esta administración quedó a deber en materia educativa, en términos de distribución de presupuesto.
Es por ello que al analizar con cuidado todos los indicadores educativos presentados por la autoridad federal, ser hace evidente que se deja un saldo negativo con la garantía del derecho a aprender de los estudiantes en México. Es esencial reconocer que la cobertura educativa ha disminuido, especialmente entre los sectores más vulnerables de la población; y que los resultados en materia de aprendizaje muestran un retroceso que no puede ignorarse.
La política educativa de este gobierno no está diseñada para atender los problemas educativos en un contexto de menos recursos públicos para educación. A esta administración le tocó enfrentar la pandemia de Covid-19, y es importante decir que desde que iniciara la emergencia sanitaria se empezaron a ver fenómenos desfavorables en el sistema educativo y que no se ha visto un interés serio para recuperar la pérdida en el aprendizaje producido por la pandemia.
En cuanto a los 10 compromisos por la educación en México que López prometió en campaña, dado el modus operandi de su gobierno, hoy no causa sorpresa que sólo se hayan materializado aquellos que tienen que ver con transferencias monetarias a los jóvenes. En los primeros cuatro años de esta administración se le quitaron 103 mil 777 millones de pesos a los programas que tenían que ver con el aprendizaje en educación básica para destinarlos a las Becas para el Bienestar Benito Juárez, afectando con ello a 12.9 millones de alumnos de preescolar, de primaria y de secundaria.
Esta administración, luego de un periodo dedicado a las modificaciones legales con el fin de lograr una nueva reforma educativa pragmática y otro dedicado a lidiar pobremente con la pandemia, intentó dar continuidad inmediata a los procesos pedagógicos con el fin de regresar, cuanto antes, a la “normalidad”, sin realizar un balance serio de sus diversas consecuencias, ni llevar a cabo algún programa específico que buscara subsanar los severos daños ocurridos en el aprendizaje.
A un par de años del final del sexenio, se tomó la decisión de impulsar la noción de la Nueva Escuela Mexicana y ponerla en práctica en todos los grados de la educación básica, sin mediar el tiempo suficiente para, al menos, comprender sus implicaciones en la formación docente, la relación con las familias y la inercia considerable de las costumbres.
En resumen, el actual gobierno tomó la educación como botín político. Además de controversias de diverso tipo en torno al sistema educativo mexicano, hoy prevalece una opacidad sin precedentes en este siglo con las medidas de política pública en el sector. Todo esto violenta los derechos educativos de los niños y jóvenes de la gran mayoría de las escuelas, particularmente las más marginadas y olvidadas.
Si cada sexenio se producen proyectos que reclaman ser la solución genial de todos los problemas, seguiremos sujetos de las ocurrencias resultantes de la ignorante soberbia y ávidas de réditos electorales.
La siguiente administración presidencial debe velar por incrementar el gasto educativo para crear y ejecutar políticas educativas fundamentadas y sostenibles que mejoren cuantitativa y cualitativamente los indicadores educativos, políticas que toquen la esencia de los diferentes niveles educativos y el desempeño de todos los agentes educativos.
LA INSEGURIDAD AFECTA A LA EDUCACIÓN
Y si todo lo anterior es preocupante por el fracaso de López y su 4-T en la educación, como colofón, 16 de julio del 2024, nos enteramos a través del Diario Excélsior que, en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, en la comunidad de San Clemente, del municipio de Pantelhó, la escuela primaria fue cerrada ante la violencia que enfrentan los habitantes, quienes decidieron irse para poder salvar la vida, y en este momento se desconoce si iniciaran el ciclo escolar 2024- 2025. Y desde hace 10 meses, las aulas permanecen cerradas, ya que por la falta de seguridad los maestros no llegan a la región.
De acuerdo con el representante de Derechos Humanos en la región de Pantelhó y Chenalhó, Reynaldo Pérez Pérez, son alrededor de 50 familias desplazadas de la comunidad de San Clemente, pero sólo hay alrededor de ocho que se mantienen en el lugar y que no han querido salir.
De hecho, la escuela dejó de laboral a raíz de los ataques propiciados por la banda criminal Los Herreras, los niños no concluyeron el ciclo escolar por temor a sufrir una agresión armada y ahora las familias no han regresado. Agregando, “No sabemos si reanudarán las clases, porque en este momento no hay condiciones”, acusando que los criminales han asesinado a niños y niñas y no hay responsables por esos delitos.
Pese a ello, dijo, la situación en San Clemente es tranquila. Las cosas están difíciles en Tzanembolom y La Esperanza, del municipio de Chenalhó. En Tzanembolom hay un destacamento militar, pero sólo de 20 elementos y las familias encerradas en la escuela son rehenes de los criminales, quienes buscan liberar bajo presión contra el gobierno a un homicida. La banda de Los Herrera, buscan liberarlos bajo presión y mantienen como rehenes a las familias dentro de la escuela de Tzanembolom.
Felipe “N” recluido en el penal 14 conocido como El Amate, ha confesado ante el juez correspondiente su delito en varias ocasiones, por lo cual está comprobado el hecho, pero una fracción de la comunidad de Tzanembolom que apoya a Los Herreras niega que sea culpable. Es por ello que el grupo de soldados que ingresó a Tzanembolom fue corrido por mujeres que portaban palos y piedras. Hasta el momento, los soldados sólo llegaron a dejar comida a un grupo de 20 militares y éstos le compartieron de sus alimentos a los rehenes. El número de soldados no puede hacer nada por estar superados en número y por ello las mujeres, hombres, niños, niñas y personas de la tercera edad permanecen en la escuela y ahí van a permanecer hasta que no haya violencia.
Esto, estimados lectores, es solamente una mínima parte de los innumerables problemas que se padecen en el país por la inseguridad que afectan a la educación, que sumada al fracaso que se mencionó, forman parte de la herencia maldita que López le dejará a Sheinbaum.
Siendo enormemente preocupante que la presidenta electa, siga afirmando que todo seguirá igual que con López. Pero, sin importarle que esa continuidad sea de los fracasos en la administración de López y su 4-T.
Bajo esa promesa, obscuro y negativo futuro para la educación se espera en el próximo sexenio. Por ello pregunto ¿Para eso votaron por Sheinbaum y Morena?