El gobernador de Chihuahua, Javier Corral, afirmó ayer que “la Operación Justicia para Chihuahua” comprende 39 expedientes penales y que continuará judicializando más carpetas de investigación, ya que va más allá del caso de Alejandro Gutiérrez, ex secretario adjunto del CEN del PRI, quien es señalado por su presunta participación en el desvío de 250 millones de pesos del erario para las campañas del tricolor en 2016.
Esto luego de que el sábado pasado, en un mensaje conjunto, el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete, y el gobernador informaron que llegaron a un acuerdo para trasladar a Gutiérrez, recluido en el penal de Aquiles Serdán (desde el 20 de diciembre pasado) al Centro Federal de Readaptación Social 9 de Ciudad Juárez.
“No queremos que en otro ámbito de reclusión se vaya a construir una estrategia para decir que fue torturado, por eso se pidió a Human Rights Watch (organización defensora de derechos humanos) que certifique el Protocolo de Estambul (procedimiento para reconocer casos de tortura) antes de que Gutiérrez se traslade a un Cefereso”, consideró el panista en una entrevista con W Radio.
Señaló que hasta el momento se han judicializado 16 carpetas de investigación y una de ellas la que involucra a Gutiérrez, sobre el cual, afirmó, no es uno de los casos más relevantes: “Se están investigando redes de corrupción política con relación a otros peculados electorales y no queremos que al rato vayan a decir: mira, ahora ya volvió a sacar otra cosa. No”.
Por otra parte, señaló que su antecesor, el ex gobernador priista César Duarte, acumula 10 órdenes de aprehensión (más una de la Fepade, del orden federal, debido a peculado electoral por un monto de 79 millones de pesos) y que tienen otras investigaciones por judicializar, ya que son entramados muy “sofisticados”, sobre todo en términos de seguir la ruta del dinero.
En cuanto a la supuesta retención de 900 millones por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el panista expresó que fue un atropello y un acto que nunca debió haber hecho la dependencia.
“Creo que, al final de cuentas, el movimiento (la Caravana por la Dignidad Unidos con Valor) desató una energía política muy importante. No sólo en Chihuahua sino en el país, que hizo que el gobierno comprendiera la dimensión de los errores cometidos. Y llámese triunfo o no, como lo quieran ver, nosotros estamos satisfechos de los términos en los que se plasmó el acuerdo”, expuso.