El abogado de Mónica García Villegas, dueña del Colegio Enrique Rébsamen, que colapsó tras el sismo del 19 de septiembre de 2017 y por el que 26 personas murieron, informó que su sentencia de 31 años de cárcel podría ser disminuida al ser acusada de homicidio culposo.
Este miércoles la docente compareció ante un tribunal de apelaciones, en el que su defensa alegó que la escuela a su cargo resistió más de 500 temblores entre 2003 y 2017 y que el desplome se debió a causas de fuerza mayor, lo que no implicará responsabilidad para la imputada.
Rosendo Gómez, abogado de García Villegas, abundó que en alrededor de tres días hábiles debería emitirse una sentencia por parte del tribunal.
Espero en el escenario más optimista la inocencia de la maestra, mi siguiente escenario es una pena de seis a ocho años; no más”, comentó el defensor a Milenio.
La reparación por daño seguirá siendo de 500 mil pesos por víctima.
Este miércoles la defensa incorporó al juicio una reforma que hubo al Código Penal el 4 de agosto “que habla de la penalidad de los delitos culposos cuando son de homicidio y se dice que los homicidios culposos de dos o más personas se sancionan con una pena única de entre seis y 20 años”.
En el caso de que se llegara a ratificar la condena el parámetro de penas sería de seis a 20 años, por lo cual indudablemente se tendría que modificar la que actualmente existe. Por otra parte, se logró exponer la teoría de la inocencia ante el Tribunal de Apelaciones y esperamos que sea atendida y determinen una inocencia absoluta de la maestra”, expuso el defensor.
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Apuntó que existen contradicciones en los alegatos de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México durante la audiencia de la dueña del Colegio Enrique Rébsamen.
Desde el principio (la maestra) trató de acercarse a los padres de familia, lamentablemente cada quien tenía una postura determinada, por los padres como la fiscalía y las asesorías, y eso hizo que no hubiera oportunidad de hacer alguna negociación o de hacer algún acercamiento en aras de que se pudiera construir una solución”, manifestó el abogado.
“Actualmente la maestra recuerda a sus alumnos con mucho cariño y para ella siempre serán sus niños, pero también respeta y ya no entra en un debate con los padres pues sería chocar y no es lo que está buscando. Ella les ha guardado un cariño por todo lo que pasaron, son sus alumnos, algunos de ellos estudiaron toda la vida en la escuela, se les guarda un cariño, un amor profundo y los que perdieron la vida los recuerda con mucha admiración y nada más”.
La directora del Rébsamen fue sentenciada a 31 años de cárcel por un juez al no poderse demostrar que la mujer, aun cuando tenía pleno conocimiento de que su conducta estaba prohibida, no respetó las normas de construcción.
Con información de Milenio
