La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) indicó, a través de un comunicado, que la Ley de Seguridad Interior en los términos que se plantea, mezcla las concepciones entre Seguridad Nacional y Seguridad Interna, además de favorecer el “uso discrecional de las Fuerzas Armadas” en el combate contra la delincuencia organizada.
Esta propuesta, continúo la CNDH, deja de lado la necesidad de emprender acciones coordinadas y efectivas, desde los distintos niveles y órdenes de gobierno, para fortalecer los recursos y capacidades de las policías civiles; y representa un riesgo para el reconocimiento, respeto y protección de los derechos humanos.
La imposición de una reserva absoluta sobre la información que se genere lo cual haría nugatoria cualquier expectativa de transparencia; la falta de mecanismos reales y efectivos de rendición de cuentas; la posibilidad de que las Fuerzas Armadas realicen tareas de investigación y prevención de delitos; así como la trasgresión a los derechos de reserva y secrecía en favor de las víctimas al obligarse a todas las autoridades a entregar cualquier información que sea requerida en este ámbito”, son otros riesgos de la propuesta de ley, señaló la CNDH.
Advierte, además, que la ley provocaría problemas de interpretación legal que transgrede fundamentos de la Constitución.
La propuesta de ley no establece en forma expresa la forma como se conciliará la prevención, investigación y persecución de delitos con el amplio espectro de conductas que se pretenden encuadrar como materia o riesgos a la Seguridad Interior, siendo en consecuencia previsible que su aplicación trasgreda, desde el origen, garantías procedimentales básicas y derechos humanos reconocidos en la Constitución”, recalcó.
Por último, la CNDH indicó que dicha ley no puede ser producto de “decisiones coyunturales o políticas”, y que no puede hacer explícita “la violación a los derechos humanos, promover la ilegalidad o contravenir la Constitución”.