CFE produce menos energía eléctrica

Sin lugar a dudas los apagones que se han estado presentando en nuestro querido México afectando a los hospitales, clínicas, ciudadanos, empresas, fabricas, comercios, han llamado la atención, cuando por el contrario López sigue afirmando que ya no los habrá y que todo está bien. Pero fuera de esas mentiras, no nos informan nada concreto.
En ese tenor acorde a lo publicado por el diario El Economista el 9 de junio del 2024, nos enteramos que la generación hidroeléctrica de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) fue de 19,568 gigawatts hora el año pasado, con lo que proporcionó únicamente 7.7% de la producción total de la empresa, cuando en 2022 fue del 14%, con un acumulado de 34,110 gigawatts hora en el sistema mediante esta tecnología.
Tratándose del menor flujo de generación hidroeléctrica desde el 2004, cuando se registraron 19,415 gigawatts hora, acorde con datos de la Secretaría de Energía y del INEGI.
Importante recordar y destacar estimados lectores, que uno de los principales planes respecto a la energía limpia nacional de este sexenio prometido y anunciado por López, fue el incremento en este tipo de producción, pero, antes al contrario, se reporta una reducción de 43% en la generación de la estatal en un año, del 36% en contraste con el último año de la administración de Enrique Peña Nieto en el 2018, y del 28% en una década.
Asimismo, con los indicadores del Sistema de Información Energética de la Secretaría de Energía, en el 2023, la generación térmica, por ejemplo, sí tuvo un incremento anual de 16% en su producción al ubicarse en 199,430 gigawatts hora, e incluso la generación eólica de la CFE. más los productores independientes de Energía (PIE) que son privados que le venden exclusivamente a la estatal, aumentó, en 5%, con un reporte de 1,918 gigawatts hora en un año. En comparación con el 2018, la generación térmica con combustibles fósiles que lleva a cabo la CFE ha aumentado 12 por ciento.
De igual manera es determinante no olvidarnos de las declaraciones tanto de López como del director general de la CFE, Manuel Bartlett, en relación a los planes para aumentar la generación hidroeléctrica nacional, y que por ello el 14 de julio de 2021 el Consejo de Administración de la CFE aprobó la modernización de 14 centrales, que se llevaría a cabo a través de un mecanismo financiero para que la estatal accediera financiamiento con tasas preferenciales. El Plan contaría con una inversión de 1,000 millones de dólares para llevar a cabo cambios de equipos como turbinas, generadores y transformadores en la infraestructura existente.
Razón por la cual, Miguel López López, subdirector de Administración y Servicios de la CFE, presentó ante los miembros del Consejo, el Plan Integral de Modernización de Centrales Hidroeléctricas en que los gigawatts hora adicionales por la modernización equivaldrían “a seis parques eólicos u ocho parques fotovoltaicos de 100 megawatts”. Y que las 14 centrales que serían modernizadas se inaugurarían a más tardar el primer trimestre de 2024, ya que esta inversión “es la más importante en proyectos hidroeléctricos y rescatará toda la inversión social que ha dejado México en estas centrales”, según el funcionario.
De igual manera, el Director corporativo de Operaciones, de la CFE, Carlos Morales Mar, aseguró que la importancia de este Plan de Modernización, vendría a dar 50 años más de vida a la infraestructura útil que se compone de 60 hidroeléctricas en el país, para aprovechar toda la infraestructura civil existente, con lo que se pretendía hacer una recuperación de los niveles haciendo desazolves con todo un programa de trabajo. Y de una generación de 2,823 gigawatts por hora hidroeléctricos que se reportó en julio de 2021, cuando se anunciaron los planes, se pasaría a 4,660 gigawatts por hora en el primer cuarto de este año.
Manuel Bartlett, Director general de la CFE, también afirmó que con el Plan de Modernización de Hidroeléctricas se cumpliría con la instrucción presidencial de rescatar estas centrales.
Pero con las sequías y las altas temperaturas, en distintas entidades, las presas han bajado a niveles de almacenamiento en promedio de un cuarto de su capacidad. Algunas presas almacenadoras como El Novillo, en Sonora, cayó hace un mes hasta 11.2%, mientras otras como Huites, en Sinaloa, bajó a 16.4%, según el Organismo Cuenca Noroeste de la Comisión Nacional del Agua.
Razón por la cual únicamente en febrero del 2024, la generación hidroeléctrica de la CFE más PIE sumó 863.915 gigawatts hora en el último reporte de generación de la CFE, alcanzando únicamente el 4.9% de la generación total, reduciéndose en 76.6% en comparación con julio de 2021, cuando en el Consejo de administración de la empresa se presentó el plan de modernización de centrales con esta tecnología, que entonces que representaba 17.3% de su producción efectiva de energía.
Pero no solamente se disminuyó la generación efectiva derivado de la poca disponibilidad de agua y los retrasos en los trabajos de modernización, sino que en la proyección a futuro del último Programa Nacional de Desarrollo del Sector Eléctrico Nacional (Prodesen) ya sólo calculó un máximo de 487 gigawatts, o sea, 1,350 gigawatts menos adicionales a los proyectados en el Plan de Modernización.
Así la cruda realidad de seguramente una de las causas de que los mexicanos estemos padeciendo apagones con las consecuencias de que hospitales, clínicas, pongan en peligro la vida de sus pacientes, negocios sean afectados, fabricas suspendan sus procesos de producción, al igual que empresas. Centros comerciales sus productos perecederos se puedan echar a perder al igual que con negocios de comida, o en nuestros propios hogares si el apagón tarda mucho, al igual que dañar aparatos eléctricos. Y qué decir de la inseguridad que genera que no haya luz.
La gran duda es ¿seguirán los apagones? ¿Qué pasó con las plantas generadoras que se le compraron a la empresa española Iberdrola? Seguiremos esperando que nos informen, o que haya más apagones y cargar con nuestros daños que ocasionen, porque ninguna autoridad se hace responsable de esas pérdidas, de vidas o materiales.