El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, defendió su decisión de no prolongar la presencia de las tropas estadounidenses en Afganistán más allá del 31 de agosto, ya que la opción era “retirarse o aumentar” el número de soldados.
El mandatario dio un discurso a la nación un día después de que las fuerzas estadounidenses pusieran punto final a su repliegue del país tras 20 años de guerra, el conflicto más largo de la historia de Estados Unidos.
Cargando Anuncio…
00:00
/
00:00
Biden utilizó esta intervención para justificar los pasos adoptados, ante el aluvión de críticas que ha recibido por la gestión de la retirada y por haber “dejado atrás” a cuando menos un centenar de civiles estadounidenses en Afganistán.
“Yo no iba a extender esta guerra eterna y no iba a prolongar una salida eterna”, sentenció Biden, con tono firme de comandante en jefe de Estados Unidos, desde la Casa Blanca.
Aseguró que optó por sacar a las tropas siguiendo “la recomendación unánime” de sus asesores militares y civiles, entre los que citó a los secretarios de Estado, Antony Blinken, y de Defensa, Lloyd Austin, y al jefe del Estado Mayor, general Mark Milley.
Además, afirmó que estaba entre la espada y la pared por el acuerdo alcanzado en febrero de 2020 entre la Administración de su predecesor Donald Trump (2017-2021) con los talibanes por el que se pactó el repliegue de Estados Unidos.
“A aquellos que piden una tercera década de guerra en Afganistán les pregunto ¿cuál es el interés nacional vital? Desde mi punto de vista hay uno: garantizar que Afganistán nunca será usado de nuevo para lanzar un ataque contra nuestra patria. Lo hemos conseguido, lo hicimos hace una década y hemos estado otra más”, expuso.
“Era hora de acabar con esta guerra“, dijo.